Empresarios hoteleros de Costa Rica exigieron este jueves al gobierno mayor responsabilidad con la seguridad de los turistas, tras el asesinato de una venezolano-estadounidense, un crimen que conmovió al país centroamericano.
"Si el Estado estuviera actuando de forma consciente en su política de seguridad para los visitantes tendría reglas de migración más claras, estaría encarcelando a los delincuentes y brindando mayor protección a los sitios que frecuentan los turistas", reclamó la Cámara Costarricense de Hoteles (CCH) en un comunicado.
Agregó que "estas premisas básicas no se están cumpliendo".
El sector hotelero se mostró consternado por el asesinato de la turista Carla Stefaniak, de 36 años, cuyo cuerpo fue encontrado el lunes con lesiones de arma blanca y un fuerte golpe en la cabeza.
La policía detuvo como sospechoso a un nicaragüense de 32 años quien fungía como agente de seguridad del hotel donde se hospedaba Stefaniak, en la localidad montañosa de San Antonio de Escazú, al suroeste de San José.
Los empresarios reconocieron que ellos tienen parte de la responsabilidad en garantizar mayor seguridad a los turistas que visitan el país.
Asimismo, la ministra de Turismo, María Amalia Revelo, insistió en que los hoteleros deben ser más cautelosos con el personal que contratan.
"Los empresarios tienen que tener más cuidado con las personas que contratan para funciones de seguridad. La ley exige revisar que la persona tenga estatus migratorio regular", sostuvo Revelo.
El detenido por la muerte de Stefaniak ingresó a Costa Rica en julio pasado de manera ilegal.
En agosto pasado, una mexicana y una española fueron asesinadas en incidentes separados cuando visitaban Costa Rica, casos que golpearon la imagen del país como destino turístico.